En la India se enseñan las "Cuatro
Leyes de la Espiritualidad"
La primera dice:
"La persona que llega es la persona
correcta".
Es decir que nadie llega a nuestras vidas
por casualidad, todas las personas que nos rodean, que interactúan con
nosotros, están allí por algo, para hacernos aprender y avanzar en cada
situación.
La segunda ley dice:
"Lo que sucede es la única cosa que
podía haber sucedido".
Nada, pero nada, absolutamente nada de lo
que nos sucede en nuestras vidas podría haber sido de otra manera. Ni siquiera
el detalle más insignificante. No existe el: "si hubiera hecho tal
cosa...hubiera sucedido tal otra...". No. Lo que pasó fue lo único que
pudo haber pasado, y tuvo que haber sido así para que aprendamos esa lección y
sigamos adelante. Todas y cada una de las situaciones que nos suceden en
nuestras vidas son perfectas, aunque nuestra mente y nuestro ego se resistan y
no quieran aceptarlo.
La tercera dice:
"En cualquier momento que comience es
el momento correcto".
Todo comienza en el momento indicado, ni
antes, ni después. Cuando estamos preparados para que algo nuevo empiece en
nuestras vidas, es allí cuando comenzará.
Y la cuarta y última:
"Cuando algo termina, termina".
Simplemente así. Si algo terminó en
nuestras vidas, es para nuestra evolución, por lo tanto es mejor dejarlo,
seguir adelante y avanzar ya enriquecidos con esa experiencia.